En la cordillera de la zona Central de Chile, al interior de Sagrada Familia, se encuentra el volcán Peteroa, rodeado de un paisaje agreste, de altos riscos y lagunas semi congeladas. Ahí, cuentan los antiguos, se ha visto en muy raras ocasiones volar al gigantesco Cóndor, al cual, si se le ve con cuidado, a la luz del atardecer que pinta rosadas las montañas, se verá su plumaje de color dorado y cobrizo.